Carlos se marchó, no pude evitar quedarme embobada viéndole andar, hasta que le perdí pues ya había dado la vuelta a la esquina. Cerré la puerta y tiré los tacones y el bolso donde pude. Estaba reventada pero aquella tarde había sido tan especial. Me sentía como una adolescente de quince años enamorada tontamente. Enamorada de aquel chico tan hermoso… Se veía que me quería y que de verdad me cuidaría. No quería hacerme ilusiones tampoco como con David, pero me sentía muy afortunada por tenerle y di gracias por haberme mandado a aquella linda persona en mi vida.
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(Carlos)
Estábamos en casa de aquella chica, yo junto con Marta, a unos segundos de conocerla. Marta me había hablado muy bien de ella, me había contado toda su trágica historia. Me sentía mal por ella, quería conocerla, apoyarla… Llamamos al timbre y enseguida abrió una chica hermosísima. Era una chica morena, de pelo largo, ni muy delgada ni muy gorda, normal, con unos ojos tirando a verdes, su tez suave y clara, una piel perfecta y una sonrisa que parecía pintada por un artista. Llevaba un vestido rojo por las rodillas, iba muy bien maquillada, natural, y unos tacones también rojos que la hacían más esbelta. Era perfecta, bella, peculiar. Sonreí al verla. Notaba como ella me miraba y durante unos segundos nuestras miradas se cruzaban. Algo en mí surgía. Me sentía extraño, incapaz de borrar esa sonrisa de idiota que tenía. Sentí como Marta me dio un codazo para que opinara sobre la belleza de aquella linda chica. No pude más que soltarle “piropos”, o al menos así lo llamo ella. Elena, que lindo nombre. Era perfecta. Se encamino a coger el bolso y en unos minutos salimos por la puerta Marta, Elena y yo. Mientras nos dirigíamos al velador no paraba de mirarla, de contemplar su belleza y aunque llevaba a Marta al lado de vez en cuando me asomaba para verla. Dichosos los ojos que la veían. Notaba como ella también me observaba, se perdía en mis ojos y ninguno atendíamos a lo que Marta nos contaba tan entusiasmada. Llegamos a aquel velador y nos sentamos. Deseaba que Marta por fin empezara su plan. Habíamos planeado que si todo iba bien y yo se lo pedía con la mirada, ella fingiría que iba al baño y nos dejaba solos. Pero ella no iría al baño si no a su casa. Así yo tendría el camino libre.
Y así fue, a la media hora Marta se fue, supuestamente, al baño. Suspiré tranquilo porque por fin estaba a solas con esa dulce muchacha, por fin podría centrarme solo en aquellos lindos ojos, en su sonrisa tan linda. Me senté a su lado y empezamos a hablar de trabajo, edad, etc. Comprobé que teníamos gustos parecidos, realmente era preciosa. Me perdía en su mirada, en su ternura, su belleza. Quería conocerla mejor y en un instante acabé diciéndoselo, acabé confesándola que quería estar con ella, que era hermosa y sentía ya un cariño especial hacia ella. ¿Pero cómo se puede querer a una persona después de una hora de conocerla? No lo sé, a lo mejor era una locura, pero Elena me atraía, había algo en ella especial. A lo mejor no era querer pero sentía la necesidad de cuidarla y protegerla, de abrazarla y acurrucarla entre mis brazos. De que nada le ocurriese. Era puro instinto protector. Ella no quería enamorarse, le daba miedo volver a sufrir después de su pasado y su amor por David. Sus ojos empezaban a humedecerse, no quería llorar, pero aquellos recuerdos del pasado le llevaban a hacerlo. Instintivamente abrí los brazos para abrazarla y ella no dudo en ocultar su rostro en mi hombro y arrancar a llorar. Era tan dulce, guapa aun llorando. Me sentía mal, ella no se merecía aquello. Aquel cabrón no se merece su amor si la dejo por eso… Pero yo estaba dispuesto a hacer lo que fuera por aquella frágil y bella muchacha. Quería amarla, quería enamorarme de ella poco a poco.
En cuanto ella derramó sus lágrimas en mi hombro y se separó de mí, sus labios estaban demasiado cerca de los míos. Sentía lentamente su respiración aun agitada por sus sollozos. Nuestras miradas permanecían fijas. Sus pequeños ojos me hipnotizaban, no me cansaba de observarla. Le acaricié el mentón y poco a poco me acerqué más a ella. Me miraba asustada pero a la vez deseosa. Quería besarla, quería probar esos magníficos labios. Quería que sus labios me llevaran a un mar de desasosiego y tranquilidad. Y así fue como en unos segundos acabé rozando sus labios. Primero pequeños besos, suaves y castos. Poco después dimos paso al deseo que nos pedía que nuestros labios se unieran con nuestras lenguas. Besos dulces, tiernos y llenos de amor. Besos distintos a los que había sentido con ninguna otra chica. Era especial y sus besos eran tan necesarios, que no podía separarme. Al final, poco a poco después de unos segundos con nuestras bocas unidas nos separamos a la vez. No sabíamos que decir, sobraban las palabras. Yo seguía hipnotizado con esos ojos, con esa sonrisa. Aun permanecíamos cerca con nuestros alientos entrecortados jadeantes de pasión.
Y fue cuando entonces ella hablo:
- Vaya… mm.. ha sido un beso fantástico, como tu… Claro que me gustaría conocerte, estoy impaciente- me dijo con una sonrisa picara.
No podía creerme lo que acababa de decir. Era feliz, me acababa de decir que me dejaba entrar en su vida, por así decirlo. Una sonrisa se dibujó en mi cara lentamente. No sabía que decir, deseaba abrazarla, besarla sin que nada ni nadie nos parara, pero tenía que contenerme. La contesté cariñosamente. La prometí que jamás me iría de su lado, pues quería estar con ella siempre. Pero en esos momentos sentí como metí la pata de nuevo.
precioso el capitulo wapisima
ResponderEliminarme encanta saber k es lo kpiensa el
y se nota k el la kiere aunk todabia no la conoce casi pero bueno
diooos sige asi enserio pork esta muy bien la historia aver k pasa aora :S
besos tQ
Me encanta !!! Que monoooo que es carlos hasta yo me he enamorado platonicamente de el !! Aiis que ansias por el próximo! no tardes mucho :)un besito !
ResponderEliminarWapisimaaaaaaa!!! Por fin subes otro capi mas!! K guay lo k piensa carlos, de veras si ke sienten algo uno por el otro!!!!! Estoy impaciente y deseosa de leer el siguiente!!!! Un besazo mi niña, Te Quierooooo!!!!!!!!
ResponderEliminarm encanto!!!!!!!!!!11 q tierno Carlos xDD, m encanta cuando escribes p parte de los hombres te keda genial,. deseando leer el siguient capii tq nena xDD
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